OPINION: ¿Se está volviendo demasiado corrupta la industria de la construcción?
Por Neil Flynn
No es ningún secreto que la construcción, en lugares como la ciudad de Nueva York, ha tenido una buena cantidad de controversias a lo largo de los años. Más recientemente, en la década de 1980, los mafiosos supervisaron gran parte de los proyectos de construcción en auge de la ciudad, al cobrar una tarifa especial a cualquiera que quisiera ensamblar hacia arriba.
La mafia controlaba los materiales para construir, controlando los sindicatos, y gestionaba los permisos para construir, teniendo el oído adecuado de políticos prominentes. Incluso magnates de bienes raíces famosos como el ex presidente Donald J. Trump tuvieron que pelear y jugar el juego, para obtener la aprobación de ciertos proyectos de construcción. Finalmente, la mafia perdió relevancia, y se establecieron regulaciones muy necesarias. Así que, ¿qué pasó desde entonces?
La Sociedad Estadounidense de Ingenieros Civiles reveló que la corrupción representa más de $300 mil millones del mercado mundial de la construcción cada año. Las autoridades de la ciudad de Nueva York se han involucrado cada vez más en desenterrar los esquemas secretos que parecen haberse apoderado de las prácticas comerciales éticas en la construcción.
En los últimos años se han hecho varias acusaciones de aceptar sobornos y comisiones ilícitas de subcontratistas, a cambio de contratos muy lucrativos. Los propietarios de edificios, generalmente, no están muy familiarizados con los recursos de construcción y los costos de cosas como mano de obra, impuestos, y permisos. Esto es especialmente para proyectos de mayor tamaño como los que incluyen grúas. Así se abre una brecha muy amplia para el fraude.
La corrupción puede ocurrir de muchas formas, que incluyen:
• Puede tener lugar durante cualquier fase del proyecto, incluida la identificación, planificación, financiación, diseño, licitación, ejecución, operación, y mantenimiento.
• Puede ocurrir en forma de soborno, extorsión, fraude, cárteles, facilitación de pagos, abuso de poder, malversación, lavado de dinero, e indiferencia.
• Puede involucrar al gobierno, propietario del proyecto, financiadores, consultores, contratistas, subcontratistas, proveedores, socios de empresas conjuntas, y agentes.
• Puede ocurrir en cualquier nivel de la estructura contractual.
• Suele estar oculta, y los implicados son cómplices o son reacios a denunciarla. Esto hace que sea más difícil de detectar.
También se cuestiona la falta de transparencia y rendición de cuentas de las instituciones gubernamentales, en el otorgamiento y gestión de proyectos públicos.
La corrupción del gobierno roba fondos a las comunidades para construir infraestructura vital para un país como; escuelas, hospitales, carreteras, proyectos de suministro de agua, energía eléctrica, sostenibilidad ambiental, etc.
La corrupción es una enorme carga económica que se produce en todas partes, independientemente de la forma de gobierno, el nivel de desarrollo, o la ubicación geográfica.
Los trabajadores, a veces, pueden quedar atrapados entre este tipo de fiascos comerciales, ya que sus lesiones en la construcción pueden causar un gran golpe a la reputación de una empresa.
Afortunadamente, hoy en día es más difícil encubrir una muerte o una lesión grave en un sitio de construcción, pero los empresarios hacen todo lo posible para asegurarse de que la cobertura de los medios de comunicación, sobre cualquier irregularidad, se oculte tanto como sea posible.
Los sindicatos han sido objeto de escrutinio por reclamos de que sus trabajadores son constantemente sobrefacturados por trabajos que en realidad nunca existen. Además, los trabajadores más antiguos, a los que se les paga más, a menudo agregan horas a su nómina para tareas mínimas que generalmente no tienen nada que ver con el proyecto en sí.
A lo largo de estos años, podemos afirmar que los contratistas se acostumbraron a pagar sobornos, o en términos más sencillos, dar propinas a empleados de diversos orígenes, para obtener «favores» a cambio.
En lugar de centrarse en las condiciones de seguridad de los trabajadores, junto con muchas otras responsabilidades, estos deberes pueden descuidarse fácilmente sin rendir cuentas a nadie. Las principales causas de estos sobrecostes suelen ser atribuibles a diversas causas, entre las que se encuentran:
• Causas atribuibles a una planificación inadecuada.
• Falta de profundidad en las hojas de cálculo financieras u hojas incompletas.
• Aspectos relacionados con permisos y autorizaciones. Lo crea o no, esto puede tener un efecto devastador en la economía.
En pocas palabras, todo está “sobre-prometido” y entregado de forma insuficiente. Por ejemplo, usted acepta financiar la construcción de un edificio nuevo, a la mitad del proyecto, resulta que el presupuesto total ya se ha agotado, y debe invertir mucho más de lo que inicialmente acordó.
Si se echa hacia atrás, todo lo que ya ha invertido se pierde, por lo que no le queda otra opción que ceder y pagar lo que resta. Dependiendo de su participación, las empresas de construcción e ingeniería también pueden sufrir, ya que les cuesta un tiempo y dinero valiosos en el uso de las herramientas.
Entonces, en esencia, la corrupción golpea al empresario de cuello blanco ambicioso e inconsciente, así como al trabajador de cuello azul. Sin mencionar que las divisiones de clase media, como los administradores del sector público, también juegan su papel.
Es más probable que las personas actúen de manera corrupta cuando pueden obtener beneficios personales, tienen poco autocontrol, perciben que la corrupción solo causará daños indirectos, y cuando trabajan en organizaciones donde el comportamiento poco ético no es castigado.
Las personas son propensas a aceptar riesgos por buenas recompensas, y tienen una baja aversión al riesgo para preservar las ganancias.
La incertidumbre tiende a aumentar la posibilidad de actuar de manera corrupta. La corrupción puede ocurrir particularmente en situaciones donde hay asimetrías de poder, es decir, donde algunos individuos (agentes) tienen poder sobre otros (sujetos).
Para mitigar estas influencias cognitivas, los gerentes deben apoyar medidas que mejoren los flujos de información sobre los costos de la corrupción, que recompensen el comportamiento ético, que establezcan estándares básicos de integridad, y que mejoren la toma de decisiones organizacionales.
No existe un método directo o sencillo para evitar la corrupción. Se deben implementar medidas integrales de lucha contra la corrupción en todos los proyectos de construcción.
La corrupción solo puede prevenirse y tratarse de manera eficaz si las organizaciones de los sectores público y privado implementan controles de gestión anticorrupción, como una parte necesaria y esencial de su
gestión diaria. Sin duda, el trabajo de las autoridades es monitorear y detener las irregularidades, pero la industria es demasiado grande para que la mayoría de los departamentos de policía la manejen de una vez. Debe haber un esfuerzo de colaboración para participar en prácticas anticorrupción, que comienza en el trabajador y llega a la cabeza de la empresa.
Las huelgas y protestas pueden ser muy perjudiciales para un proyecto de construcción, por lo que si se informa sobre la corrupción a quienes trabajan en el proyecto, luchar contra estas injusticias también es una solución de primera línea.
Un paso a la vez, con la participación de todos, y la corrupción en la construcción se puede erradicar de una vez por todas.