OPINION: Robinson Canó y sus grandes registros

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EL AUTOR es periodista. Reside en San Francisco de Macorís.

El intermedista dominicano Robinson Canó es una de las principales figuras  del béisbol,  de los jugadores mejores pagados del negocio y uno de los más grandes de la posición cuatro de todos los tiempos.

El petromacorisano es  el primer jugador en la historia del juego que despacha al menos 30 dobles en sus primeras 12 campañas en las Mayores. Solo cuatro jugadores han tenido una racha tan extensa en temporadas sucesivas con 30 batazos de dos bases, y los otros tres a parte de Canó son figuras legendarias del juego: Stan Musial, Tris Speaker y Honus Wagner.

Canó  está en el  cuarto  año de un contrato de 10 por 240 millones de dolares con los Marineros de Seattle y cumplirá 35 años en el mes de octubre. Los registros  del segunda base criollo son impresionantes (.307-279-1093, 1067 anotadas, 482 dobles, 2219 hits, .852 OPS). Su promedio anual es de 184 imparables, 23 jonrones y 91 remolcadas. Cualquier intermedista envidiaría esos números en sus primeros 12 años.

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Las estadísticas globales del dominicano son extraordinarias, pero hagamos una evaluación de su pasado, presente y futuro. Canó tuvo sus mejores años con el conjunto de los Yankees. Un estadio favorable para los bateadores, pero con la fanaticada y los medios más exigentes del universo. El criollo compiló sus mejores registros, incluyendo cinco temporadas seguidas de al menos 25 cuadrangulares (2009-2013) y tres temporadas de más de 100 impulsadas.

La temporada pasada se pareció a sus  mejores años en el Bronx, alcanzando su mayor total de cuadrangulares en una temporada (39), con todo y jugar en el Safeco Field la mitad de sus encuentros. Remolcó y anotó 100 por vez primera con los Marineros, sumando 195 imparables.

El presente de Canó es un tanto diferente a sus primeros años en Seattle. Demostró que se ha podido adaptar a un estadio desfavorable para los bateadores de poder y no tiene la presión de los primeros años y sus 240 millones.

El futuro de Robinson Canó será sumamente  interesante. Sin prisa y con siete años más garantizados, en una ciudad donde no existe la presión de los medios como se evidencia en  New York, Chicago,  Los Ángeles o Boston.  Es un jugador dedicado y saludable, promedia 154 juegos por año, a tal punto que el año pasado  participó  en 161 encuentros. Su  contextura física y disciplina le permitirán jugar con calidad hasta cerca de los 40 años o al menos  tener unas seis buenas temporadas.

Canó estaría terminando su carrera cerca de los 3000  imparables (necesita 130 como promedio por los próximos seis años), este año alcanzaría los 300 jonrones y  seguro 500 dobles. Solo tres intermedistas han disparado más de tres mil hits, dos más de 300 jonrones (Jeff Kent y Roger Hornsby), dos han conectado 600 dobles (Biggio y Nap Lajoie) y  cinco defensores de la segunda almohadilla  han empujado 1300 carreras.

Al día de hoy entre los grandes jugadores de la posición cuatro ocupa el segundo lugar en bases por bolas intencionales (98),  tercer lugar en slugging (.497), quinto en jonrones (279) y OPS (.852), sexto en promedio de bateo (.306), séptimo en extra bases (794), octavo en dobles (482), decimosegundo en remolcadas (1093).

Con salud y cinco o seis temporadas decentes, Robinson Canó finalizará como el intermedista con los números más completos en  la historia de esa posición.

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