Mientras el pueblo duerme Danilo Medina trabaja

imagen
EL AUTOR es abogado. Reside en Santiago de los Caballeros.

«El trabajo es amor hecho visible. Y si no puedes trabajar con amor sino solo con disgusto, es mejor que dejes tu trabajo y te sientes en la puerta de un templo a pedir limosnas de aquellos que trabajan con alegría».

Kahlil Gibran

 

Cuando me disponía a escribir un artículo sobre un tema de literatura que tenía pendiente desarrollar hice una reflexión sobre el trabajo afanoso de las hormigas y lo comparé con la labor que realizan algunos hombres que le ha tocado dirigir los destinos de una nación y, sobre todo, observé confundido lo ligera o endeble que resulta la mente del hombre de la postmodernidad para recordar y valorar aquello que recibe desde el Gobierno como estímulo a sus desarrollo.

 

Frente a lo absurdo habría que preguntarse: ¿De qué clase de sociedad o de composición social estamos hablando que nos lleva a no esperar de ella reconocimiento por haber obtenido algo que le beneficia y lo ayuda a engrandecerse social y materialmente? Al mismo tiempo pienso que no se debe esperar nada de nadie, se debe actuar por voluntad propia. Espéralo todo de ti.

 

Se ha escrito bastante sobre la capacidad de trabajo, la perseverancia y la paciencia de las hormigas. Además de la laboriosidad de estos animalitos habría que agregar que ellas anteponen su propio beneficio al de la comunidad y no se detienen. Cabe que nos volvamos a preguntar: ¿No sería que las hormigas trabajan por objetivos? Y, seguidamente, vuelvo a dudar: ¿Cómo vencen las hormigas los obstáculos que muchas veces se le presentan en el camino? Una hormiga hace todo lo que pueda para cumplir con su trabajo.

 

Pensemos que las hormigas tienen un deber, una responsabilidad con su comunidad y ese compromiso o contrato social es impostergable, en otras palabras: no es negociable. ¿Por qué es ineludible hacer el trabajo sin importar lo que se presente en el camino? Porque el bien de una es el bien de toda la comunidad.

 

La labor de las hormigas es igual a cuando el presidente Danilo Medina va a las comunidades de Gaspar Hernández, Jamao al Norte, Joba Arriba y Los González de Juan López y le entrega a la Asociación de Productores de Vegetales de la provincia Espaillat la suma de 109.4 millones de pesos a través del Fondo Especial para el Desarrollo Agropecuario (FEDA) para el desarrollo de productos agropecuarios; el presidente está haciendo como las hormigas, contribuyendo con el nivel de vida de la gente de toda esa comunidad de hombres y de mujeres trabajadores.

 

La estabilidad emocional y societaria de las hormigas es fundamental para su supervivencia y crecimiento de la especie. El gobernante que tiene conciencia de su responsabilidad social frente a su pueblo siempre muestra esa disposición de trabajar sin desilusión y con firmeza como las hormigas.

 

Cuando vemos o leemos en los medios de comunicación que la oposición política ataca el programa presidencial denominado «Visita sorpresa», es porque alguien allá afuera pretende hacer el papel del saltamontes. ¿Por qué el saltamontes y las hormigas se llevan tan mal? El saltamontes busca siempre esclavizar a las hormigas mientras ellas tienen que trabajar para que estos coman. Tal es la actuación de la oposición, la del saltamontes, que pone a alguna gente a marchar y a protestar vestido de colores para utilizarle en su provecho.

 

¿Cómo es posible que usted por estar opuesto a un gobierno que trabaja no se alegre del bien de la comunidad y pretenda, en cambio, que el Gobierno no vaya en ayuda de las familias formadas por hombres y mujeres laboriosos? El presidente Medina les facilita recursos económicos a los agricultores del país para que estos puedan desarrollar sus proyectos agropecuarios sin dificultad.

 

Las mujeres son un componente esencial en el desarrollo y progreso de la familia. Entendiendo el rol de este grupo social el jefe del Estado decidió visitar los municipios más apartados de Restauración, Partido, Loma de Cabrera y Santiago de la Cruz para constatar la situación socioeconómica de toda la zona y al mismo tiempo observar con sus propios ojos el progreso del proyecto de gallinas ponedoras del Centro de Madres Mujeres Unidas Emprendedoras, a quienes le entregó 3.9 millones de pesos para que continuaran desarrollando tan sanos y loables propósitos.

 

Un gobernante que no tiene horario para la faena que requieren de su auxilio y de su aliento anheloso merece ser acompañado en sus sueños de construir una patria grande que pueda erguirse sobre su propia estatura y así alcanzar a ver el despliegue luminoso del éxito al que solo se puede llegar con el esfuerzo de sus músculos remando con tenacidad hacia la orilla.

 

Mientras el pueblo dominicano duerme con la tranquilidad del armadillo gigante de Sudamérica enterrado en su camastro esperando el despliegue de la aurora, el presidente Danilo Medina toma los senderos cambroñosos de la Línea Noroeste, similar a cuando Moisés llegó al monte Sinaí y vio la zarza que ardía sin consumirse y en la llama del fuego se le apareció el ángel del Señor y le dijo que se descalzara porque el suelo que pisaba era una tierra santa, a pesar de su aridez.

 

El presidente Medina se presentó ante la Asociación de Ganaderos de Aminilla, de Santiago Rodríguez, y le hizo entrega de un cheque de 4.35 millones de pesos. De igual manera visitó a los integrantes de la Asociación de Productores de Vegetales «Gral. José Cabrera», los cuales manejan unos 22 mil metros cuadrados de invernaderos sembrados de ajíes para consumo local y la exportación, según lo informó recientemente el FEDA.

 

El jefe de Estado dominicano no pretende, de ninguna manera, convertirse en el ángel custodio de los campesinos, como aquel ángel que aparece en algunas religiones, en cambio, llegó a la  comunidad de Quita Coraza para asumir un compromiso con los pobladores de Vicente Noble, cuyas actividades agrícolas estaban prácticamente paralizadas y las condiciones de vida de la zona mermadas por la falta de equipamiento.

 

En esta oportunidad Danilo Medina les entregó a los campesinos un sistema de bombeo con dos electrobombas de 8 y 12 pulgadas, que tanta falta les hacía, para facilitarle a más de 450 productores incrementar su producción y, al mismo tiempo, elevar sus niveles de vida. Pocas veces en la historia republicana se ha oído de gobernante  dominicano alguno que haya mostrado tanto interés y determinación para devolverle al campo su vitalidad y a sus hombres y mujeres trabajo y bienestar económico.

 

Podría referirme a otros tantos proyectos agropecuarios que miles de  productores de los campos dominicanos se han beneficiado de los recursos del FEDA a través de la Presidencia de la República, pero por la escasez de espacio en los periódicos en los cuales publico mis artículos no me permitirían prolongarme.

jpm

Compártelo en tus redes:
ALMOMENTO.NET publica los artículos de opinión sin hacerles correcciones de redacción. Se reserva el derecho de rechazar los que estén mal redactados, con errores de sintaxis o faltas ortográficas.
0 0 votos
Article Rating
Suscribir
Notificar a
guest
7 Comments
Nuevos
Viejos Mas votados
Comentarios en linea
Ver todos los comentarios