Maduro rechaza formalmente la ayuda humanitaria; la tilda de «show barato»
CARACAS.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha asegurado este viernes que va a seguir impidiendo la entrada de ayuda humanitaria que estos días se acumula en la frontera con Colombia. «Venezuela no va a tolerar el show barato de la ayuda humanitaria, porque no somos los mendigos de nadie», ha respondido a la pregunta de un periodista de El País en una rueda de prensa con los medios internacionales en el Palacio de Miraflores.
El mandatario ha dicho además que, en todo caso, los alimentos, insumos y medicamentos que esperan la entrada en Venezuela en la ciudad fronteriza de Cúcuta deberían ser repartidos entre los ciudadanos colombianos víctimas de la pobreza. Por su parte, el líder de la oposición, Juan Guaidó, ha vuelto a pedir a los militares que permitan el acceso de las cajas, pero varios camiones continúan bloqueando la frontera.
Mientras, el Gobierno colombiano ha definido la operación que coordina con Estados Unidos y Guaidó como «eminentemente humanitaria», y dice que incluye provisiones para alimentar a más de 5.000 venezolanos durante diez días, elementos de higiene para 7.500 personas durante 10 días y kits médicos de emergencia que servirán a 10.000 personas durante 90 días. «Es importante resaltar que aunque contamos con la seguridad militar y policial, la cual agradecemos, esto se trata de una operación eminentemente de tipo humanitario», ha indicado el director de la Unidad Nacional para la Gestión del Reisgo de Desastres (UNGRD), Eduardo José González, en referencia a la supuesta «invasión extranjera» que ha aducido Maduro en varias ocasiones para evitar la entrada en el país.
Dispuesto a recibir Contacto de UE
El presidente también ha dicho estar dispuesto a «recibir a cualquier enviado del Grupo de Gontacto [creado por la Unión Europea para resolver la crisis política] […] y hablar, ojalá nos escuchen», pero ha arremetido contra la declaración firmada este jueves, que tilda de «parcialización e ideologización», fruto del «extremismo con el que ven a Venezuela».
El mandatario ha vuelto a ofrecer diálogo a la oposición, pero siempre desde el grupo gestionado por México y Uruguay, países que apoyan su Presidencia y rechazan a Guaidó. «Estoy listo para el diálogo inmediato, cuando sea, para la negociación, la construcción y la suscripción de acuerdos», ha asegurado.
La crisis política en Venezuela continúa sin resolverse por el enfrentamiento dialéctico entre el presidente y el opositor: Maduro no acepta dialogar con la UE ni con el «imperialismo estadounidense», que dice busca apoderarse y enriquecerse del país latinoamericano; mientras que Guaidó rechaza ser partícipe de todo diálogo con Maduro que no pase por el «cese de la usurpación», es decir, por convocar elecciones presidenciales.