Los falsos filántropos: Margarita y la filantropía
UNO
Ahora resulta que no importaba, después de todo, que el orden fuera un poco brutal o un poco ciego, porque el poder justifica en sus banderas el rigor de la arbitrariedad, la corrupción y la muerte, por la santidad de aquellos a quienes abrumaba. Así esta sociedad ha perdido del todo el dominio de sus desventuras. Y siempre estamos inmersos en el gesto de vivir la última degradación de la historia. ¿Acaso no parecía ser Joaquín Balaguer el espanto final de la historia dominicana? Balaguer era una antigualla sin ningún nexo creativo con las complejidades del mundo posmoderno. Ni la mentalidad, ni sus ideas respecto del aparato del Estado, ni el valor de su experiencia, arribaban a una confluencia de contemporaneidades abiertas a la plenitud del mundo de hoy.
DOS
Aun así, Balaguer nos legó su casta.
Su liderazgo real se empinó sobre la filantropía. Tras la muerte de Trujillo él administró todas las transiciones hasta el 1996, y dio inicio a un tipo de líder mesiánico enchivado entre la dictadura y la democracia formal. Empleó todo el poder económico heredado del poderoso Estado trujillista, y personalizó abusivamente los programas asistenciales, instrumentalizando la pobreza y pervirtiendo al “populacho irredento” que veía en la acción del Estado a su benefactor.La historia dominicana ha vivido como algo propio el baile de las máscaras de los “filántropos”. Son los dirigentes de nuestro país quienes la han encanallecido. Si Balaguer convirtió la filantropía en un instrumento efectivo del inmovilismo social, y la usó como catapulta de su liderazgo; en nuestros días el caso de Margarita Cedeño de Fernández debería ser objeto de estudio por sicólogos y sociólogos. Como Balaguer, es en la “espuma de la filantropía (Deleuze)” que ella ha construido un “liderazgo”.
TRES
La Real Academia de la Lengua define la palabra filántropo de la siguiente manera: “Persona que se distingue por el amor a sus semejantes y por sus obras en bien de la comunidad”. Es una suerte de despojo, una rebelión unipersonal contra la inhumanidad del orden establecido. Lo que se supone es que el filántropo no espera nada, ofrece lo suyo, y da un portazo estruendoso contra el conformismo criminal. Un heroísmo sin objeto, ni más ni menos. Lo contrario es tomar al otro por objeto, otorgarle atributos a sus propias víctimas, beneficiarse de la indefensión y la miseria, del miedo y el poder del desasosiego material y moral que engendra la pobreza. La falsa filantropía pone a merced del beneficiado su poder alquímico de transformarle la vida, y se queda en el puro gestuario del demagogo queda lo que no es suyo, y ofrece por piedad fingida lo que debería corresponder por derecho.
CUATRO
Los falsos filántropos conciben un programa para difundir “su obra filantrópica”. El niño con insuficiencia coronaria congénita está a punto de morir y requiere una operación urgente. Aparece Margarita. A la señora viuda depauperada la casa mugrienta que habita se le está cayendo encima. Aparece Margarita. Un inválido se arrastra porque no tiene silla de ruedas. Aparece Margarita. El ciego fatalmente hundido en su ceguera está también cercado por la miseria más dura. Aparece Margarita. Una familia entera padece una enfermedad extraña, incurable y ruin, casi son despojos humanos que esperan la muerte. Margarita aparecerá. Cada capítulo del programa despliega una vida en trance de perdición, y la mano de la “filántropa” se solicita por adelantado.
CINCO
La corrupción extrae del presupuesto público alrededor del cuatro por ciento del producto interno bruto. Sin la corrupción tal vez no necesitaríamos filántropos. Y la filantropía es falsa porque naufraga entre el hecho literal de la miseria y la ambigüedad repugnante del filántropo. Es un espectáculo penoso que lucha contra la terquedad de la realidad. Es desmontar la subversión de quienes se roban el patrimonio público. Es hundir la sociedad en la prestidigitación del cinismo que reemplaza la acción social por el favor personal. ¡Algún día nuestro país aprenderá a despreciar a tantos falsos líderes, que sólo hacen agudizar la miseria material y moral de la nación, en el mismo momento que fingen ser condolidos y piadosos con los cuartos del presupuesto!
JPM
ya este escritor mediocre tiene asignada su botellón con la hija del mafioso hipólito quirino mejía
ese mismo dinero del presupuesto ha sido usado por tu prm antiguo prd para echàrselo en los bolsillos y provocar hambruna que a su vez a provocado matanza como la de abril de 1984 , generales presos, gente huyendo otros todavìa. todo lo invirtieron en sus bolsillos, pregùntele a michelén , si lo encuentra. con hipólito nos pusieron a pasar habre, a hacer filas ,etc. no invierten en nada y todo se lo roban. ni con nuestro dinero hacen obras de caridad, y entonces? gracioso!
todo lo que usted dice es cierto. lo otro cierto es que margarita y los que no son margarita que hacen filantropia, lo hacen con el dinero nuestro, y de paso, son multimillonarios a costa de nuestros padeceres. lo que me gustaria que usted entienda, es que la ceguera partidaria nos hace dano a todos, y lamentablemente, muy pocos ciudadanos son honestos consigomismo.
el filantropo da de los suyo. si reparte recursos que el gobierno tiene destinado para ayuda social, quien hace la reparticion no es filantropo, simplemente es un cumplidor de las funciones asignadas.
esta serpiente viperina solo expulsa veneno con todo lo que escribe porque margarita si tuvo el éxito que tú no has podido tener ni como periodista ni escritor… pluma fracasada a favor de la marioneta prohaitiana de abinader solo te queda eso esperar la botella que no te la dieron en el pld y por eso tu odio visceral… pero seguirás esperando esa botella hasta el 2044
sr luis ventura por favor vuelva a leer lo que el sr andres esta explicando,no contra ningun partido sino una gran explicacion de lo que es un filantropo,en el caso de margarita no se le puede llamar filantropo,porque ella estaba usando el dinero del estado.andres no esta atacando a ningun partido politico,como dominicano tiene derecho a simpatizar por algun partido politico y denunciar las barbaridades de funcionarios corruptos,no es pecado por lo tanto es libre para elegir por quien dar su voto.
vamos a cambiar la palabra filantropía por demagogia, oportunismo y/o aprovechamiento. también podemos agregar amnesia, pues habiendo sido secretaria del prof. bosch, no aprendió nada de las enseñanzas de este, que independientemente de las contradicciones políticas que se pudieran tener con él, era un hombre honrado. ella no se detendrá hasta llegar a la presidencia de la república, aunque tenga que pactar con el diablo.
simplemente exelente este arti**** de nuestro recio intelectual andres l. mateo, sin desperdicios, claro, para gente inteligente, no para coprofagos como muchos de los opinan en este foro.
creo que el .001% de los lectores podrían entender este artí****, pues se requiere de ciertos sentidos abstractos para su comprensión.
andrÉs l. mateo sin desperdicio.magnÍfico retrato de la demagogia.