Los «anti» de la izquierda: una máscara de hipocresía

Antes de hacer más extensivo este humilde aporte, me gustaría   definir dos palabras que  forman parte  del título de este artículo,  para de esa forma hacer más comprensible el mensaje que quiero transmitir o lo que son mis conceptualizaciones sobre determinadas ideologías políticas  y el proceder de sus principales figuras  en  sus actuaciones.
 
    Para comenzar,  lo haremos con el prefijo «anti» que de acuerdo al Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española significa  «opuesto o con propiedades contrarias». En cuanto al término «hipocresía», el cual también aparece en este  humilde aporte,  el referido diccionario  lo define  como: «fingimiento de cualidades  o sentimientos contrarios a los que verdaderamente se tienen o experimentan». 
 
Dicho esto, paso a desglosar mi opinión en torno al «anti» que caracteriza a la ideología izquierdista en todo aquello que no se identifique totalmente con sus postulados y, sobre todo,  sus «anti» más preferido que es el «anti imperialismo yankee» y  el «anti capitalismo»
 
    Desde que Vladimir IIyich Ulyanoc (a) «Lenín», encarnó  en la Revolución Bolchevique  de octubre de 1917 las ideas políticas, sociales, filosófica y económicas  de Friedrich Engels y Karl Marx expuestas por ambos en el famoso «Manifiesto Comunista» del 1848,  hasta la Revolución Cubana liderada por  Fidel (Hipólito) Alejandro Castro Ruz,  el ser más perverso y mentiroso que ha parido la tierra del «Titán de Bronce», el «anti-imperialismo»  y el «anti-capitalismo» han sido las dos consignas más identificable del social comunismo. 
 
Pero, no cabe duda alguna, es la  conducta más cínica e hipócrita de los líderes socialistas, sobre todo, los que forman parte del populismo moderno. 
 
    Para demostrarlo, voy a poner tres ejemplos recientes,   haciendo caso omiso a los cientos de casos que podemos  señalar y que nos demuestran la suprema dicotomía política  entre lo que se predica a las masas descerebradas y  tontos útiles  y la conducta que realmente exhiben los líderes y regímenes socialistas que no se cansan de mostrarse con el sambito  ya desfasado y obsoleto del  «anti» esto y  el «anti» aquello. Veamos.
 
    La Venezuela chavista y Goldman Sachs:
 
     La noticia causó asombro y hasta sorpresa hasta en las propia filas del chavismo agonizante. La llamada «revolución socialista del Siglo XXI», que se ufanaba  de ser tan «anti-imperialista» y «anti-capitalista», se postró frente a una de las entidades símbolo del capitalismo norteamericano como lo es el banco finaciero Goldman Sachs.  Recientemente, la colonia de Cuba en el cono sur fue el blanco de las noticias, al trascender que la cuenta que tiene la Rep. Dominicana con Petrocaribe, ascendente a la suma de US$4,000 millones de dólares, le fue traspasada al banco financiero Goldman Sach (lo más puro del capitalismo norteamericano) en una operación financiera que para la citada banca,  ganaría un 59% de la deuda cobrable a la Rep. Dominicana ascendente a unos US$2,360 millones de dólares y, en cambio a ellos, la Venezuela chavista, bolivariana , soberana y «anti-imperialista» recibiría por dicho traspaso de deuda  la suma de US$1,750 millones de dólares.
 
    Sobra decir que los motivos para esa transacción obedecen a la escasez de liquidez de recursos monetarios, debido a una profunda crisis económica que hace que el régimen chavista, que tanta aureola creó en la américa morena esté haciendo agua. Una vez más queda demostrado que el socialismo marxista no funciona. Fidel Castro lleva 50 años años echándole la culpa de su fracaso a los Estados Unidos dizque por un supuesto «embargo y bloqueo».   Entonces,  cabe la pregunta: ante este colapso bolivariano, que no tiene ni «bloqueo ni embargo»,  cómo se explica este desastre que hoy prima en una nación  que está cimentada sobre una inmensa riqueza del llamado «oro negro»  en su subsuelo?
 
    La Cuba castrista y la monarquía saudí :
 
    Hay noticias que no tienen mucha publicidad, pero no por ello no dejan de ser muy importante para desenmascarar a estos líderes farsantes y  sus actuaciones que no son más que  puras poses llena de  hipocresía y de doble moral.  La pasada semana fue dada a conocer la información de que Arabia Saudita, la monarquía más vieja del Medio Oriente y una aliada vital de los Estados Unidos en esa región y con fuertes vínculos económicos con Japón y la Unión Europea, que son  naciones capitalistas y afines políticamente, ha concedido  a través del Fondo para el Desarrollo Saudí la friolera de unos US40 millones de dólares en un préstamo blando a la isla más «anti imperialista y capitalista» de la bolita del mundo. Dicho préstamo fue para la rehabilitación hidráulica de la ciudad oriental de Camaguey.
 
    Aquí el cacareado «anti-capitalismo» y la postura «revolucionaria y soberana» del castrismo, que se jacta de su «independencia absoluta» frente a naciones altamente capitalista, Fidel Castro lo mandó a vacacionar a la playa de Varadero.  Como ya sabemos, la «isla Felicidad» no produce nada, pues la revolución destruyó su economía de mercado y expropió miles de empresas. En consecuencia, vive de la generosidad de naciones como su colonia Venezuela que le sumistra 100 mil barriles de petróleo gratis y le ha subvencionado numerosas obras.
 
   De la misma manera, se vive del turismo europeo y sus adorables euros y  ni que decir de los dólares (la moneda del malvado imperio) que envían mes  tra mes los «gusanos de Miami» y, como ya he dicho en otros trabajos, también de la trata de médicos en 66 naciones en el mundo.  Cuba es mala paga, fue por eso que los rusos cansados de esperar tuvieron que cancelarle la deuda de US$40 mil millones que les debía y otro tanto han hecho los chinos.  No hay garrapata  política más succionadora que la Cuba castrista. Ya sabemos de su desesperación por que le levanten el embargo, y nos preguntamos: y cuál es el afan por negociar y comprar las cosas  que produce el «malvado imperio» ?
 
El Guapo del Ecuador:
 
    Rafael Vicente Correa Delgado, actual presidente del Ecuador, se ha caracterizado por ser un mandatario que le encantan vociferar todo cuanto pueda en contra de los Estados Unidos. De igual forma,  asume postura  ( sin nadie pedírselo) que van en contra de los intereses de la patria de Lincoln, como fue el caso de  Edward J. Snowden y  del periodista Julián  Paul Assange, al cual le dio asilo en su embajada en Londres, Inglaterra, en donde se encuentra  desde el 12 de julno del 2012 hasta el día de hoy. No disimula su odio en contra de la tierra en el cual completó su doctorado en economía, lo que demuestra  también que es un mal agradecido.  
 
    No obstante ello, sabe usted cuál es el principal socio de su gobierno y de la nación que él preside y que aspira hacerlo mientras respire? Los Estados Unidos . Además, resulta irónico que el sueldo que él percibe como gobernante y la moneda que es el uso obligatorio en su país, sea el dólar norteamericano, la moneda símbolo del capitalismo «decadente». No es el rublo, ni el yen, ni mucho menos el peso cubano.
 
    Dos cosas a mi modo de ver, han perfilado la animosidad de este populista en contra de la nación norteamericana. La primera, su adolecencia carente de recursos, con muchas dificultades y colmada de miseria.  Es propio en la mayoría de los líderes izquierdistas de hoy en día, culpar a los Estados Unidos de sus precariades en sus vida y crecen con ese resentimiento social.
 
   La segunda razón y la que considero más poderosa que la primera, fue el no haber superado aún  que su padre un reconocido narcotraficante ecuatoriano de nombre  Rafael Correa Icaza, haya sido un prisionero de los Estados Unidos por ser sorprendido llevando dos kilogramos de cocaína.  Es la razón por la que el presidente Correa  lleva desde hace tiempo esa «espina» en contra de la nación americana  y a su vez, es tan  «benevolente» con las mulas del narcotráfico (como lo fue su padre), al decir de ello lo siguiente: «No son delincuentes, sino madres y padres desempleados tratando de dar de comer a sus hijos» ????
 
   En conclusión, podemos afirmar sin rubor alguno con estos tres sencillos ejemplos,  que la hipocresía asumida por figuras y gobiernos populistas frente a los Estados Unidos  se puede sintetizar en la conocida frase del conocido poeta español del Realismo Ramón  de Campoamor y Campoosorio  cuando dijo: » Ni contigo ni sin ti tienen mis males remedios, contigo porque me matas y sin ti porque me muero»
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