La pequeña del escaparate
La niña estaba al frente del negocio informal en una concurrida e insegura avenida de la capital. Su extraordinario desempeño quedaba grande a sus diez años
Al principio creí que era una broma, que un adulto era el encargado y que la muchachita calmada y diligente solo relajaba conmigo
Pero el tiempo dispersó las dudas y las cambió por asombro, incertidumbre y una recua de preguntas, algunas exteriorizadas, otras solo pensadas
La explicación que me dio otro vendedor adulto es que la madre sale a diligencias y la deja al frente- pero esa es más viva… y nosotros la cuidamos. Estamos pendientes-
Es admirable la destreza de esa chiquita, su manejo del comercio, del dinero, el compromiso, la seriedad con la que lo asume. Sin embargo, el asunto va mucho más allá ¿Es esa en verdad la manera de alejarla de situaciones negativas?
Rodeada de ese ambiente difícil de manejar hasta para los mayores, de alguna forma por más protegida que esté entre sus compañeros experimentados, su estabilidad emocional está en riesgo y su niñez podría verse cercenada por un prematuro paso a la adultez
Mas, quizás estas sean solo exageraciones y contribuyan a su desarrollo esos momentos en los que la madre la deja sola al frente del innovador escaparate temático, que llama la atención en esa arteria
¿Habrá que esperar qué dice el señor tiempo, ese gran sabio?
of-am