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La masacre de haitianos no se cruzará a pie
Freddy Prestol Castillo, autor de la novela “El Masacre se pasa a pie” inmortalizó las aguas y el paisaje del lánguido riachuelo que, perezoso y menguado, discurre hacia la costa por el norte de la isla de Santo Domingo separando Haití de la República Dominicana.
La masacre que con despreocupado alborozo y al ritmo de tambores y cornetas prepara la extrema derecha dominicana no se cruzará a pie. El río Masacre y zonas aledañas no será necesariamente el escenario de la masacre de haitianos que se avecina y hacia la cual se empuja al país en cada emisión radiofónica, en cada portada de periódico, en cada cántico patriotero.
La presencia ilegal de cientos de miles de haitianos en territorio dominicano no es hoy ni ha sido nunca producto de conjura alguna. Ha sido y es el producto necesario de la diferencia en los niveles de pobreza de uno y otro y en la abdicación indigna de las responsabilidades y obligaciones de cuidar la frontera y la integridad del territorio por parte de todos los gobiernos dominicanos durante los últimos cincuenta años. De la irresponsabilidad nuestra y de la corrupción en la cual se ha sustentado, quieren culpar ahora a los haitianos y a quienes, desde gobiernos e instituciones en otras partes del mundo, acogen la causa de aquellos con interesada simpatía.
La inmensa mayoría de los haitianos que conocemos son negros, muy pobres, generalmente “feos” y con frecuencia malolientes. No queremos parecernos a ellos. No queremos mirar hacia atrás porque ese lastre africano de atraso y miserias representa todo lo que no queremos ser, todo de lo que abjuramos y con todo el sabor a prejuicio y discriminación que esos sentimientos puedan contener, la verdad es que nadie está obligado a querer ni a sentir simpatía por los haitianos.
Para sentir como sentimos respecto a los haitianos no hacía falta inventarse conjuras ni demonizarlos ni atribuirles fines y propósitos que ciertamente no albergan porque de tanta hambre y tanto atraso ni siquiera cabeza en su sitio tienen.
Gente que vive cada día en la incertidumbre y la inseguridad de su propio albergue y sustento, no tiene ánimo, intención y capacidad para pensar una conjura ni vida para instrumentarla.
La única conjura en la que participan los haitianos es la que ha inventado la patriotería dominicana con el agravante de que mucha de esa canalla dominicana no asumirá las consecuencias de su irresponsable proceder, ni tendremos tribunales que juzguen su conducta ni le pidan cuenta por sus hechos ni por la sangre derramada.
La campaña de demonización de haitianos se alimenta todos los días y a toda hora sindicando y culpándolos de cualquier cosa que esté mal. Hemos estado sembrando odio contra los haitianos en lugar de adecentar nuestras instituciones policiales, judiciales y militares para darle vigencia a nuestras prerrogativas como país de exigir un permiso, una documentación y otras obligaciones a los extranjeros que residen o trabajan en nuestro territorio. Algo sencillo, que la corrupción y malos gobiernos no han permitido implementar, ha sido transformado en una campaña de odio irracional, patriotero y vergonzante que está a punto de producir no el linchamiento y la persecución en turba de maleantes de algún haitiano desamparado como ya ha ocurrido, sino de una verdadera masacre como los pogroms en que vivían los judíos en Europa Oriental o las matanzas de Tutsis y Hutus en África.
La conveniente y oportuna división de la sociedad dominicana entre pro y anti-haitianos no solamente dificulta comprender y solucionar el problema, sino que oscurece deliberadamente el horizonte y deja el problema intacto. Busca en una masacre el expediente de salvación política que de otra manera se le escapa.
El problema de la presencia ilegal y masiva de haitianos en territorio dominicano es pura y simplemente un problema de orden público, no de soberanía. Las leyes existen, los reglamentos y las instituciones también. Lo que no hay es la voluntad, la credibilidad ni la autoridad moral para aplicarlos porque las instituciones corrompidas, maleadas y desmoralizadas que tenemos por todas partes no tienen la vocación, la dirección, ni la disposición de cumplir con su deber porque se saben de antemano desautorizadas y deslegitimadas.
Pero sepa la canalla patriotera, desde el innoble cardenal que tan mal representó la iglesia a la que pertenece, hasta los historiadores de pacotilla, panfleteros, plumíferos y politicastros, que este país que dicen representar ya ha caído en el descrédito internacional por el torpe manejo de la cuestión haitiana pero, y este es un pero muy importante, cuando tenga lugar la masacre de haitianos que preparan, esa no la vamos a cruzar a pie como el río Masacre.
Los dos millones o más de dominicanos en el exterior van a sufrir las consecuencias de una masacre de haitianos; van a ser criticados, condenados, aislados y desfavorecidos. Muchos programas de ayuda y cooperación serán cesados. Algunas represalias físicas tendrán lugar contra dominicanos en otras partes del mundo. Ninguna autoridad democrática querrá asociarse con nuestra causa porque la tolerancia ante el genocidio es cada día menor y varios serán los foros de los cuales seremos excluidos y numerosos los programas de turismo que serán suspendidos.
Un país que se prepara para el genocidio y la masacre de haitianos no puede esperar más que ostracismo y condena, sobre todo, si ese país ya tiene antecedentes y si esa masacre fue perpetrada contra haitianos indefensos y hambrientos.
Los descendientes de esa gran epopeya que fue la Revolución Haitiana culminada en 1804, la primera república negra, los ex esclavos liberados, toda la gloria pasada de ese pueblo está ahora en manos de una canalla política desvergonzada que vive de la crisis, se lucra de ella y tiene en bancos extranjeros una parte no pequeña de la ayuda externa a Haití de la que se han apropiado impunemente. Esta gentuza es tan culpable de la masacre que se avecina como los patrioteros dominicanos. Es la misma canalla en castellano o en creole. Si nosotros los dominicanos tuviéramos un centímetro cúbico de sentido común y de compasión, en lugar de demonizar a los haitianos y acusarlos de una conjura inexistente de la que ni se han enterado, estaríamos ayudándolos en el plano internacional no solo a tramitar ayuda sino a administrarla mejor y no para el beneficio de esa misma canalla política que los gobierna.
Entiendo que el señor Danilo Medina no es arte ni parte de esta conjura. El gobierno es muy débil pero la masacre que se gesta le golpeará por igual. Está en nuestro mejor interés como país ayudar a Haití porque no podemos hacernos cargo de sus miserias, ni queremos compartir su suerte. Para nosotros, si quisiéramos aprender, reproduzco el comentario que me envió un amigo quién, refiriéndose a nuestro manejo del problema haitiano escribió: «lo que hagas … le harán… lo que hagas te harán» o como solíamos decir en nuestro propio país: no hagas a otro lo que no quieres que te hagan a ti.
JPM
En la defensa de la nacion no hay punto medio Miguelito ! O se defiende o no se defiende ! O esta con tu nacion o estas
En la defensa de la nacion no hay punto medio Miguelito ! O se defiende o no se defiende ! O esta con tu nacion o estas con ellos y sus complices !
https://uploads.disquscdn.com/images/38329144ed9b16ddce0389daedfb563951e4e483f4f30c46aa197081244bee34.jpg,
Eso es lo que se merecen los prohaitianos, las ONGs, personeros de organismos internacionales desgraciados y traidores y los mismos mañeses, empeñados en hacer daño a RD y destruirla. Todo el que atente contra la Patria, debe ser colgado del palo mayor. Danilo Medina debe ser el primero en ser colgado!!!
El tristemente celebre Freddy prestol castillo! Solo cerdos como el que escribe pueden darle veracidad a semejante desproposito !
Se pretende confundir al país. Inmigrante no es lo mismo que invasor. El inmigrante es llamado y dejado entrar y permanecer en un país para suplir mano de obra necesaria. El inmigrante se fusiona y respeta las costumbres y la cultura del país a que va y muchos se quedan para siempre adquiriendo la ciudadanía luego de muchos años de permanencia y prueba de fidelidad a ese país, hasta teniendo que jurar frente a su bandera y demostrar conocimiento de su idioma, su historia y su vinculo con el país. Esa nacionalización tampoco se otorga automáticamente, los países tiene una… Leer mas »
Totalmente de acuerdo contigo, hermano!!!
Ahora tendria R. D. que chuparse la miseria que representa tener haitianos mendigando en nuestras tierras por temor a ser suspendido por estos organismos que menciona to’ el que defiende al haitiano, pero en R. D.- Por que, al haitiano, no se defiende en Haiti?. Cual sera el compromiso que tiene nuestro pais, R. D., de estar siendo receptor de una sociedad que nadie, ningun pais, lo quiere?. En R. hay mas traidores dominicanos que defienden al haitiano, que haitianos, en Haiti. Luchen pa’ que al haitiano, no le den el pezcado, sino, el anzuelo. Peeeeeero, por favor, que este… Leer mas »
Melvin Mañón: «Gente que vive cada día en la incertidumbre y la inseguridad de su propio albergue y sustento, no tiene ánimo, intención y capacidad para pensar una conjura ni vida para instrumentarla. « Con el establecimiento de una «minoría» étnica (naturalizados) con poder político, ONGs y organismos internacionales -que entienden que la solución a las deficiencias del Estado haitiano en materia de salud, educación y documentación- deben ser resueltas por el Estado dominicano, utilizarán la misma como un Caballo de Troya. Melvin Mañón: «El problema de la presencia ilegal y masiva de haitianos en territorio dominicano es pura y… Leer mas »
Este fue uno de los primeros vividores que por una limonita del USAID, juro por la bandera Mañesa, es tan Haitianofilo como Danilo y Abinader y es incrompresimple que se le de cabida en un diario Dominicano, sus basuras solo deben ser publicadas por el diario Haitiano «le Nouvelle Acento», si acaso.
Este tipo, hasta es peor que Danilo, Abinader, Juan Bolívar Díaz, Huchi Lora y demás yerbas »prohaitianas». Dios mío, cuántas porquerías hay que oír en un una sola persona!! Es increíble, este tipo se canta y se llora, pues conoce a cabalidad las raíces de esta indeseable inmigración, y en vez de buscar soluciones viables, se despotrica en contra de los que sí amamos verdaderamente nuestra Patria. Nuestros deseos de deshacernos de esta indeseable inmigración, que no aporta nada bueno para el país, no van más allá de esto, de pedir que se cumplan las leyes migratorias, que el gobierno… Leer mas »
Dos cosas veo en el articulo de este senor:
1) Pro-haitiano
2) Recibe dadivas de Danilo!
Que pena! Los haitianos son nuestro pesar. Puede que el simple ciudadano haitiano no sepa que hay una conjura: la de unir las dos naciones! Yo no tengo nada en contra de los haitianos, siempre y cuando se mantengan como los obligo Rafael Trujillo hace cincuenta y tantos anos: DEL LADO OESTE DEL RIO MASSACRE!
Por eso es que votare por Ramfis Dominguez, por su consigna FUERA HAITIANOS DEL TERRITORIO DOMINICANO.
En R.D. se debe comenzar primero con una limpieza de dominicanos pro-haitianos traidores, algo compatible con un ideal de Duarte cuando hizo un llamado a escarmentar a los traidores.
El autor es otro pro-haitiano traidor con el descaro de añorar, según él, la grandeza de la creación de la nación haitiana.
Los desafortunados comentarios de francomano y juan perez vienen a darle la razon a Melvin cuando expone: La conveniente y oportuna división de la sociedad dominicana entre pro y anti-haitianos no solamente dificulta comprender y solucionar el problema, sino que oscurece deliberadamente el horizonte y deja el problema intacto. Busca en una masacre el expediente de salvación política que de otra manera se le escapa.
Sucede que el Sr. Espaillat es un farsante, quien votó por el Sr. Donald Trump, pero vive defendiendo la causa haitiana en detrimento de la dominicana.
Yo no sé qué busca este señor en querer que nuestra Patria se humille dizque para alojar haitianos. Al diablo Miguel Espaillat, que se vaya al infierno con sus haitianos!!!
Miguel, pero tú nunca mencionas la irresponsabilidad histórica del gobierno haitiano, que al adjunto de organismos internacionales, que como la ONU, que aun interviniendo Haití, nunca han buscado soluciones viables para que ese país se desarrolle, sino que cuentan con RD para que sus gobiernos abandonen las políticas sociales y tengan que desviar los magros recursos en pro de subsidios en salud,alimentación, en educación y en otros, para con estos extranjeros, que no son dominicanos, y cuyas cifras extra oficiales, se acercan a la peligrosa cantidad de 5 millones, en un país que cuenta con diez millones de dominicanos, constituyendo… Leer mas »
Y no se averguenza de declararse anti-dominicano y traidor.!!
Por qué nuestro país tuvo la desgracia de que hayan nacidos en sus entrañas cucarachas y basuras como este personaje ??!!
Yo creo que el único país en el mundo en donde no haya consenso ni para tratar temas vitales como lo es la soberanía nacional, es sólo este paísaje. Cuánta mala suerte que tenemos los dominicanos que valemos la pena, rodeados de víboras y alimañas tan traidoras!!! Oh, Duarte, dónde estás?
Otro traidor más…de tantos.
Los comunistaa traidores y retrógradas como este fatal, son viejos promotores de la fusión.
Este antidominicano ahora quiere lavarse las manos como pilato…mañoso como dice su nombre
Lo que se sabe del Sr. Espaillat es que votó por el Sr. Donald Trump, convirtiéndolo automáticamente en un farsante.
Que quede bien claro, no es el hecho de haber votado por el Sr. Donald Trump que lo convierte en un farsante sino que se opone a que la política migratoria del Sr. Donald Trump sea implementada en R.D. en contra de los haitianos.
Las muertes de Caamaño, Amìn Abel Hasbún, Otto Morales, el Moreno, los Palmeros y cientos de patriotas más, tal parece que no ha valido la pena, y reniega las frases pronunciadas por Caamaño antes de aventurarse en Playa Caracoles: »La sangre vertida por nuestros hermanos, no ha sido ni será nunca derramada en vano». ‘The blood shape by ours brothers, that isn’t and not will be in vain»
Realmente, hay muchos ingenuos, con buenas intenciones, pero equivocados, que han sacrificado hasta sus vidas en causas fracasadas. Puede ser duro, pero es la realidad.
Es uno de los graves errores de los comunistas, que quieren ser juzgados por sus intenciones, y no por el resultado real de sus hechos que al final es lo que vale.Lo cierto es que esos regímenes izquierdosos, generalmente concluyen en hambre y dictadura. En el caso de RD, la izquierda fanática ha prodigado la invasión haitiana, dizque ayudandolos porque son pobres.
Los comunistas con sus buenas intenciones «joden» a cualquiera
Así es, estos »izquierdosos», siempre han considerado que los haitianos, según ellos, son »proletarios». Esas son las excusas y argucias que estos descerebrados usan para apoyar a los mañeses. Qué te parece el caso, hermano?