Jean Cruz dice que «al actuar busco remover cimientos establecidos»
Madrid, 11 jun.- Las tablas de un teatro fueron «el punto de arranque» del domínico-español Jean Cruz en la interpretación, la cual se ha convertido para el actor, ahora en la serie «Mercado Central», en un medio para transformarse a nivel personal y «agitar conciencias»: «Al actuar busco un cambio en mí y remover cimientos establecidos», dice a Efe.
Contar historias que muevan al público es un denominador común en el mundo de la interpretación. Se busca emocionar, hacer reír, causar contradicción, duda, reflexión o, incluso, enfado. Un intento de provocar reacciones que, en muchas ocasiones, se ha convertido en algo mecánico y superficial.
Es en ese punto en el que emergen historias de actores que buscan explorar más allá de lo superficial y encuentran en la interpretación una poderosa herramienta activadora del cambio, no sólo en el público, sino en su propia persona.
El actor Jean Cruz ve la vida a través de ese prisma transformador en el que la interpretación se convierte para él en una especie de terapia con la que agitar su propia conciencia y la de aquellos que ven su trabajo.
«Al actuar busco un cambio en mí y remover cimientos establecidos. De manera egoísta, busco que tenga un efecto en mí y me transforme y, al mismo tiempo, quiero que agite conciencias. Busco poner ese espejo, a través de mi interpretación, en el que el público vea reflejadas ciertas actitudes, comportamientos y maneras de ser de las que a veces no somos conscientes», argumenta el actor.
Nacido en Santo Domingo (República Dominicana), Cruz vino a vivir a España con ocho años y fue poco después cuando descubrió el mundo artístico a través de clases extraescolares que «englobaban baile, canto e interpretación».
El actor, que se define como una persona positiva y con los pies en la tierra, reconoce, por otro lado, que es amante del riesgo: «Me gusta arriesgar. En eso está la vida, en apostar por algo e ir a por ello, aunque luego pueda salir mal. También se aprende así».
Esa determinación y empuje le llevaron a que, después de ciertas experiencias «demasiado superficiales» en el mundo de la publicidad y tras graduarse en Comunicación Audiovisual, se decantará por las tablas de un teatro, donde encontró su refugio: «Fue el punto de arranque, donde me di cuenta de que estaba las vísceras, la realidad que yo buscaba con la interpretación».
«En el teatro tienes que estar presente. Es el ahora, es conectar con el público y, para mí, es mi conexión a tierra», explica el actor que, actualmente, da vida a Jonathan en «Mercado Central», la serie diaria que RTVE produce junto a Diagonal TV en las tardes de La 1.
Tras participar en obras de teatro como «Gazoline», «No es tan fácil» o «El funeral de los necios» y con pequeñas intervenciones en series como «Familia» (2013) o «Centro Médico» (2016), en 2019 le llegó la oportunidad de hacer un personaje principal en «Mercado Central»: «Era un caramelito, una oportunidad enorme».
Relata que tras hacer la prueba para dar vida a Jonathan sintió que el papel era suyo y que la conexión con él había surgido al instante. Llegó, así, la oportunidad y, al mismo tiempo, el reto más grande de su vida: «Una diaria es una escuela, pero es una experiencia dura, una locura».
«Se establece una simbiosis muy bonita entre persona y personaje que no cambio por nada del mundo», relata el actor, quien habla, por otro lado, del reto de enfrentarse a una serie diaria: «La intensidad y la velocidad a la que rodamos solo se encuentra en una diaria y, efectivamente, el reto más grande es conseguir lograr un raccord emocional porque no grabamos las secuencias de manera cronológica».
El actor desvela su secreto y cuenta a Efe que siempre lleva una libreta en la que apunta sus secuencias, de manera ordenada, y «el grado de intensidad» que debe imprimir en ellas. Asimismo, además del entrenamiento y la escuela que supone una serie diaria, Cruz reconoce que el personaje le ha «enseñado muchísimo» gracias a su transparencia y «buen corazón»: «He ganado bastante como actor y como persona».
No obstante, a pesar de hablar de simbiosis y conexión con su personaje, Cruz apunta que es «capaz de diferenciar» su vida y la del personaje y no llevarse los problemas a casa, aunque sí reflexionar y nutrirse de ellos: «Me ayuda a ver mi realidad con otros ojos».
Deseoso de volver al teatro para tener esa «conexión a tierra», como él la llama, con esa parte más «realista» de la interpretación que sólo las tablas de un teatro pueden aportarle, el actor hace hincapié, cuando habla de futuro, en el efecto transformador que tiene para él el hecho de poder actuar.
«El futuro es imprevisible, y más en la situación en la que estamos, pero yo tengo claro que la interpretación es como un bálsamo de vida para mí, me ayuda como ser humano y creo que si tiene la capacidad de ayudarme a mí puede hacerlo con aquellas personas que vean mis interpretaciones», concluye.
of-am
felicidades por sus logros. españa hace años que nos da la oportunidad de conocer sus grandes puertas para el arte.
jaltura.