Héroes y heroínas
Con el nivel de riesgo que implica estar expuesto al contagio de una enfermedad tan letal como el Covid -19 en condiciones normales, constituye una proeza estar sirviendo como soldado en cualquiera de las líneas de combate.
En esa dirección, el servidor público o privado que se encuentre en el actual contexto laborando en los supermercados, farmacias y colmados, deben recibir de sus patrones no sólo el reconocimiento sino una remuneración extraordinaria.
Ese colectivo heroico que cotidianamente sale al teatro de la guerra a exponer sus vidas en medio de esta desgracia, debe al menos ser beneficiado no solo con la protección debida, sino, con un incentivo metálico adicional.
Son ellos los que con su coraje y laboriosidad permiten que una parte importante de la población dominicana en este tiempo de tormenta pueda recibir diariamente los alimentos y medicinas de manera oportuna.
Son verdaderos héroes y heroínas, son titanes del compromiso y el servicio al prójimo, capaces de desafiar diariamente el peligro y la muerte sin importarles las condiciones adversas.
Vista esta circunstancia, uno ha de preguntarse ¿cuáles son razones que han impedido que de manera pública, tal cual hiciera el Gobierno, los empresarios y propietarios de los referidos negocios y empresas no hayan anunciado las compensaciones extraordinarias a sus colaboradores?
Converse con unas de las cajeras de una importante cadena de supermercado del país y me confeso en privado, que la venta de ella en una jornada laboral de 6 horas en este tiempo de Coronavirus, su venta fue de alrededor de un millón de pesos. Cuenta la misma la dama que en los dos años que lleva laborando allí jamás había vendido esa cantidad de dinero en un día.
Visto esto es de justicia entender que los sacrificios debemos asumirlo todos, que es una canallada que en momento donde ellos, los dueños de supermercados, farmacias y colmados, están ganando más; estén exhibiendo un nivel de explotación que indigna y una ambición desmedida. Así no.
JPM