Gobierno, poder y justicia 

El optimismo es una marca que muchas veces se aposenta en las venas medulares de las personas faltos de sensatez y secuenciales ideas para ejecutar acciones favorables, en razón de que cuando no se tiene principios ni tacto para desarrollarlas difícilmente se puedan lograr los objetivos y las metas.

Traigo el tema a colación con frases un tanto fuera de contexto y lo dejo en el escritorio a disposición de ciertos analistas, eruditos y “entregados” a la defensa de ciertos personajes ligados a la corrupción administrativa, quienes muchas veces observan la marca y el envase, sin embargo, no se detienen a analizar el contenido para descubrir si realmente llena las expectativas de ventas hacia los potenciales cliente o blanco de público específico.

Hoy día los partidos políticos están asediados por la ambición de poder entre sus representantes de larga data, reservistas por demás, siempre dispuestos a confundir al votante y luego de llegar al poder los cambios en su comportamiento son la diferencia de las propuestas profesadas ante los públicos.

“El poder omnímodo de la justicia hasta Dios lo ve y aunque sea a largo plazo surte sus efectos”. Espero no equivocarme…Pienso que el Poder Judicial de la República Dominicana, a partir del nuevo Gobierno tomará un nuevo rumbo… Eso es lo que espera la ciudadanía que fue a las urnas esperanzado en un cambio radical de las políticas administrativas de los Poderes del Estado. 

Más que un gobernante con ciertas ataduras y rasgos de buen administrador, el presidente Luis Abinader debe convertirse en un gran observador del manejo de sus ministros y funcionarios en las diversas instituciones del Estado, a los fines de que el país pueda recuperar la transparencia que por décadas viene demandando para relanzar y estabilizar la economía.

No comparto las injusticias, mucho menos los privilegios, porque entiendo que la justicia debe ser transparente, aplicarse con principios y de acuerdo a las Leyes que rigen los pueblos…La Procuraduría General de la República (PGR) debe iniciar un proceso de investigación claro contra los cuarenta y nueve (49) funcionarios, ex funcionarios y allegados al Partido de la Liberación Dominicana (PLD), vinculados a los actos de sobornos de la Empresa Constructora Norberto ODEBRECHT.

También entiendo que la justicia debe ser de doble vía y no girar la balanza hacia la parte más interesada o vinculada al partido gobernante, como siempre ocurre en el país, con el único propósito de no afectar intereses internos, por lo que, si en el marco de las investigaciones hay en los archivos de la Procuraduría funcionarios vinculados a otros gobiernos, estos deben ser llamados a declarar sobre sus fortunas hechas a destiempo, tomando en cuenta sus declaraciones juradas de bienes.

Después de tantos tropiezos, diatribas y mal manejo de las instituciones del Estado, el país necesita de un presidente que ponga los puntos sobre las íes dando ejemplos que enaltezcan de la manera más sublime la presente administración, sin atajos e intereses oportunistas que contribuyan a desacreditar la gestión del presidente Luis Abinader, como ha sucedido con otros que llegaron al gobierno cargado de buenas intenciones y a final de cuenta terminaron en el charco de la podredumbre como sucedió con Danilo Medina e Hipólito Mejía.

Para gobernar con transparencia no se trata solo de desarrollar la inteligencia nutriéndola de nociones, sino de la gran necesidad de formar la conciencia moral, cívica y social para lograr el progreso individual y colectivo que todos anhelamos. La buena administración de justicia dependerá del poder visionario de cada gobierno.

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JPM