Félix Bautista: final de la pesadilla judicial
El 21 de octubre del 2015 será una fecha que el senador Félix Bautista y al igual que sus familiares, recordaran mientras vida tengan, fue el día en que acabó la tormentosa pesadilla que lo acompañó durante varios años.
Sometido al escrutinio de la justicia acusado de tráfico de influencia, lavado de activos, malversación de fondos públicos y un largo etc, su expediente fue archivado por carecer de pruebas por el director del antiguo Depreco Otoniel Bonilla.
A la llegada de Francisco Domínguez Brito a la procuraduría general de la república, este pidió que fuera desempolvado el expediente para ser conocido de nuevo, ya que según él, habían aparecido nuevos elementos de pruebas en contra del senador sanjuanero.
La Suprema Corte de Justicia lo complace y se abre de nuevo el caso, esta vez más viciado que desde el original expediente que fue archivado, esto porque lo que se hizo fue una especie de copy page, o copiar y pegar.
Durante más de 16 audiencias preliminares los acusadores y defensores exponían sus argumentos tratando de convencer al juez que llevaba el caso Alejandro Moscoso Segarra, fueron largas horas de intensos debates.
Finalmente el juez Moscoso Segarra entendió, y así se lo hizo saber a la nación, que el acusado y sus compañeros estaban siendo juzgado dos veces por los mismos hechos y les otorgó un no ha lugar, porque no encontró ningún tipo de evidencias condenatorias.
El país se enarbola, acusa al magistrado Segarra de vendido y hasta de asalariado de Félix Bautista, en fin, como se dice en nuestro país, le cayeron los palitos al juez por su decisión judicial.
Este no ha lugar representa una derrota para el ministerio publico encabezado por Domínguez Brito, que ni corto ni perezoso apela al fallo y pide que el caso se conozca en un tribunal superior, de nuevo se conoce el mismo y en el primer intento resulta un empate entre los cuatro jueces.
Se designa un quinto juez para tratar de lograr un desempate, y precisamente se ratifica el no ha lugar basando los tres jueces que votaron a favor que los acusados ya habían sido juzgado dos veces y eso no es correcto en materia penal.
Traigo toda esta historia porque habría que estar muy adentro de la piel tanto de la del senador Félix Bautista, como las pieles de sus familiares incluyendo hijos, hermanos, sobrinos ect, ect.
Todos ellos fueron víctimas de críticas, burlas y atropellos, por parte de personas que fueron alimentadas con odios y malos resabios por algunos comunicadores que condenaban al legislador sin darle la oportunidad de defenderse.
Aquí desde hace muchos años ha surgido una claque de hacedores de opinión que mantienen campañas mediáticas en contra de determinadas figuras políticas y empresariales, sin importarle los daños emocionales que puedan causar a ellos y sus familiares.
La justicia la quieren manejar a través de los medios, esos comunicadores son capaces de fabricar sentencias condenatorias muchos antes que los jueces las emitan, y Félix Bautista fue una de sus víctimas.
Domínguez Brito montó varios show con esos comunicadores, lo hizo por asuntos meramente políticos, por dañar la figura del senador sanjuanero, para sacarlo de circulación en aras de que este no sea una especie de piedra de tropiezo en sus aspiraciones políticas.
Si al procurador general de la república le interesa tanto que se haga justicia en todo el país ¿Por qué solo se ensañó con Félix Bautista? ¿Por qué no actúa con tanta gallardía en los casos Darío Contreras, Banco Peravia, Fonper, y el más reciente OISOE?
La insensatez del procurador llegó tan lejos, que pisoteo y embadurnó la propia justicia que el dirige, permitiendo que un acusado sea juzgado dos veces por las mismas acusaciones.
Y no piensen que él no lo sabía, si tenía, y tiene suficientes conocimientos de eso, pero lo hizo adrede para presentarse ante el país como un gran paladín justiciero.
Fue una estrategia muy bien pensada por Domínguez Brito, someter de nuevo un expediente con ese vicio legal, para enlodar a los jueces de La suprema Corte de Justicia, a sabiendas que iban a fallar a favor de los acusados.
Todo lo hizo fríamente calculado, tal y como diría El Chapulín Colorado, si contaba con la astucia de los jueces que conocieron el caso, el plan consistía poner entre dicho a los jueces de una de las altas cortes, porque estos si iban a fallar correctamente, tal y como lo hicieron.
Era una especie de un switch eléctrico de doble tiro, si lo condenan ganaba y si no también, porque los jueces iban a quedar mal parado ante la opinión pública si daban un fallo favorable, como así mismo ocurrió.
Desde mi punto de vista Domínguez Brito no merece desempeñar esas funciones de procurador general de la república, ya que un hacedor de justicia, no puede ensañarse ni perseguir con tanta rabia a un acusado, como este lo hizo con Félix Bautista.
Pero lo demasiado hasta Dios lo ve, al fin ya terminó una larga y tediosa pesadilla en la vida del senador Félix Bautista.