El bumerang del PPH
Está suficientemente demostrado que el fanatismo, la excesiva emotividad, el resentimiento obsesivo y la ausencia de prudencia son cualidades totalmente inaceptables en los dirigentes que se les presume liderazgo de las organizaciones políticas que tienen vocación o posibilidades de acceder al poder del Estado.
Lo anterior viene a colación a propósito de la “evidente tirria” que, a través de diferentes declaraciones, ha manifestado el líder del PRM—PPH contra el ex Presidente Leonel Fernández, a tal grado de haberle “redactado el acta de defunción política” en atención a unas “demoledoras informaciones que daría a conocer” como plataforma política para los objetivos del PPH.
La obnubilación que le genera la tirria del líder del PPH le llevó a la “increíble hazaña” de rebajar su calidad de ex Presidente de la República para solicitar una cita y visitar en su casa a un convicto narcotraficante porque así podría obtener datos con los que “destruiría la imagen personal y “mataría políticamente” al también ex Presidente Fernández. ¡Garrafal error político!
Dar credibilidad y asumir como “buenas y válidas” las informaciones provenientes de un adolorido narcotraficante para pretender “enterrar políticamente” al ex Presidente Fernández se convirtió en un verdadero bumerang contra el líder del PPH. Veamos:
El convicto narcotraficante usó un video para reiterar el “dolor y profundo resentimiento” que anida en su atormentada conciencia contra el ex Presidente Fernández ya que, al quinto mes de su segundo gobierno (el 18 de diciembre del 2004) fue capturado y extraditado a los EE.UU. donde fue condenado al ser sorprendido con un cargamento de 1.387 kilos de cocaína, dañinas actividades que durante el gobierno del PPH realizaba con el mayor desparpajo contra la sociedad.
Para lo cual, precisamente, se valía de su amistad con el gobernante de turno y alto rango de oficial militar (Capitán del Ejército)que, en contra de las opiniones y recomendaciones del Ministro de las FF.AA. de la época, le había otorgado su amigo, el ex Presidente y el líder del PRM—PPH.
Oportuno es recordar que, siendo militar, con el rango de Capitán, el líder del PRM—PPH también utilizó al confeso narcotraficante como “Jefe Campaña para la región sur y Elías Piña” de sus aspiraciones reeleccionistas, en el 2004.
Por “agradecimiento de los favores que había recibido”, en el referido video, el archi conocido capo también afirma que, de nuevo, volverá a dar su apoyo a la precandidatura presidencial del líder del PRM—PPH, para lo cual pondrá a su disposición parte de sus cuantiosos recursos.
“Relevo de pruebas” ante la auto declaración del convicto capo. ¿Quién ha resultado ser el verdadero beneficiado de los recursos y actividades del narcotraficante?
¿Por qué, días después que salió dicho video y se denunció la campaña sucia contra el ex Presidente Fernández, es que el líder del PRM—PPH admite e informa de su “cordial reunión” en la casa del narcotraficante?
Es claro que un amplio sector del PRM se siente avergonzado de esa insólita acción del líder del PRM—PPH que, sin lugar a dudas, es producto del odio, su vano empeño en hacer daño, la chabacanería y la torpeza política que caracterizan al líder del PRM—PPH.
Por eso es que las informaciones del video y las declaraciones del líder del PRM—PPH reflejan la evidencia de una lamentable suma de la obsesiva tirria que atiborran el “alma y accionar” de los dos entrañables amigos, lo cual se convirtió en un vergonzoso bumerang contra la imagen y endebles aspiraciones políticas del líder del PRM—PPH.