De las señales de humo a las redes cibernéticas
POR JUAN SILVA
Viajando en el intrépido potro del tiempo, la imaginación se detiene sorprendida ante ese sinuoso camino que nos conduce hacia nuestros ancestros y sus primeras necesidades de comunicar sus deseos, expresar sus miedos, advertencias, sus afectos o fobias por animales o semejantes.
Vivir al amparo de cuevas protectoras de las inclemencias exteriores, proporcionó a nuestros ancestros el primer aposento donde procrear, guardar frutas para mañana o conservar una fogata para defenderse del frío o asar una vianda para hacerla fácil de comer.
El contacto con el fuego o su producción casual por el choque de algún pedernal, o los reductos encendidos de algún volcán que produjo los primeros leños encendidos, es una posibilidad razonable de que el hombre primitivo conociera y utilizara el fuego y lo utilizara para sus necesidades de alimento, abrigo o protección contra los animales que competían por espacio vital.
Hasta que nuestros ancestros empezaron a plasmar sus deseos y necesidades en las paredes de las cuevas, en tabletas de barro o cortezas de papiro, no alcanzamos a saber algo de la forma en que vivían nuestros. cotratatarabuelos hace miles de años .
Estas elucubraciones del pensamiento, pueden parecer inútiles o vacuas, pero, no es cierto. La curiosidad es intrínseca a nuestra naturaleza, siempre queremos averiguar cómo son las cosas que llegan a nuestro alcance. Desde niños, indagamos por dentro y por fuera, rompemos los primeros juguetes o mordemos las primeras rutas en busca de lo que hay detrás del forro, o cáscara, o la piel del seno que nos alimenta con exquisita gratuitidad .
Qué bueno que así haya sido. Desde las primeras indagaciones de los hombres y mujeres primitivos, hasta llegar a los habilidosos organizadores de las maravillas mecánicas y electrónicas que moldean nuestra vida actual!
Suponemos, que el hombre empezó a comunicarse con sonidos y gestos, luego, dejaba instrucciones en las paredes de sus cuevas, mas luego, imprimió la idea en piezas movibles que podía guardar y llevar a otros lugares y comunidades En esa continua mejoría de servidumbre colectiva, hoy llega a nosotros con nitidez en momento real desde distancias enormes, acontecimientos con fidelidad, encantadora, guardado y reproducido con el más soberano albedrío .
Los avances de las comunicaciones electrónicas se han convertido en una fiera imposible de maniatar para políticos, militares, narcotraficantes y delincuentes de la más variopinta colección. Cualquier muchacho de escuela puede grabar un acontecimiento o palabra objetable sin que se le pueda impedir con facilidad. Maniatar al tigre de la informática se le hace casi imposible a los perpetradores de robos, abusos y manipulaciones dolosas de funcionarios, agiotistas, militares y matones de baja denominación, ¡Todos estamos metidos o atrapados en la red.
A cualquiera nos desnudan ante el mundo. Donald Trump, Puttin, Maduro, Danilo, Lula , Mujica o el Chapo, son tan vulnerables como el policía que golpea o dispara abusivamente contra un ciudadano o una manifestación de indignados contra la corrupción. Nadie tiene poder absoluto para el ocultamiento o a torcer la realidad.
El caso ODEBRECHT, El pillaje de los banqueros de la Bolsa de Wall Street en 2008, la explosión atómica de Chernobyl y Japón, los pagos indebidos a Joao Santana y su esposa para hacer propaganda política con dinero del pueblo a favor de un candidato a quien la Junta Central Electoral le asigna un monto generoso para esos fines. No lo han podido ocultar, porque todo eso está accesible en los medios electrónicos para Juan del pueblo y para los pocos comunicadores que no se han vendido a la corrupción.
Gracias a los medios electrónicos de información, hay varios presidentes encarcelados y otros esperando su turno a que el pueblo le pase la factura como le pasará a los narco-político de Méjico y República Dominicana cuando la mano de la información les desnude ante una justicia decente e imparcial que les obligue a devolver el dinero robado al pueblo.
Que no le carguen la culpa la a los hombres que inventaron la comunicación con señales de humo o con imágenes en ladrillos aplastados, de eso hace mucho tiempo.
La electrónica ayudará a ponerles la cadena al cuello a tantos criminales prepotentes y burlones que nos sacan la lengua porque creen, que el pueblo sigue comunicándose con recaditos escritos en papel de fundas.
of-am