Abinader entrega muelles en Río San Juan y Cabrera para la pesca
Primer Ministro Haití seguirá en Puerto Rico, su futuro es incierto
Festival de Cine Fine Arts Hecho en RD será del 2 al 8 de mayo
Senado de un partido: ¡es el sistema!
¿Cómo ve el victimario el bullying?
Cosas por enderezar que andan a la deriva
Combatir la corrupción desde el seno de la sociedad
Luis Abinader se erige como el líder único en el PRM
Reconocimiento a Maximiliano Gómez
Los Gigantes del Cibao firman con el jardinero Jeisson Rosario
IV Clásico de Atletismo Félix Sánchez de Bayaguana en la RD
Wesley Bryan continúa dominio en el Corales Puntacana de Golf
¡Cuántos disparates políticos!
Hace más de cincuenta años (nuestra memoria no recuerda la fecha con exactitud), que el autor de ésta columna, en el programa que hacía en «Radio Caribe» titulado «La Revista de la Prensa Nacional e Internacional: El Mundo desde Radio Caribe», comenzó a decir y reiteramos desde entonces, que la política es un Arte y una Ciencia que se aprende como oficio militando permanentemente.
No solamente hay que nacer con las condiciones, la sensiblidad y vocación para convertirse en un político profesional, sino también es fundamental tener por lo menos dos virtudes: Prudencia y Discreción. Es un oficio y una profesión, como la Ebanistería, la Carpintería, la Mecánica o la Herrería, y cuando decimos profesión es porque es igual que ser Médico, Abogado, Ingeniero, Agrónomo o Arquitecto. Desgraciadamente en nuestro país el ejercicio de la política para muchos se ha convertido en un relajo, una falta de respeto.
Esa situación que vivimos en estos momentos es la que genera los disparates que la llamada «Oposición Política» está cometiendo.
Disparate es un «hecho o un dicho disparatado» y «disparatado” quiere decir “Contrario a la Razón», según lo afirma el diccionario de la Lengua Española, de la Real Academia Española. Y disparates son «las exigencias del Partido Revolucionario Moderno», publicada en los medios de comunicación escritos el jueves 21 de Julio del corriente año. Exigen que debe participar en la convocatoria para discutir la elaboración de la Ley de los Partidos Políticos, las llamadas organizaciones de la sociedad civil con incidencia nacional, como «el CONEP, la AIRD, ANJE, ACIS, FINJUS, Participación Ciudadana, Centro Bonó y la AEIH y otras que han expresado preocupación sobre estos temas». Suponemos que deben ser la USAID, el Embajador de los Estados Unidos y su Esposo, los representantes de la LGBT, el recién nombrado Arzobispo Primado de Santo Domingo y cuarenta y cinco comentaristas radiales y de medios escritos, de ambos sexos, que viven emitiendo juicios, opiniones e instrucciones al gobierno nacional.
El atrevimiento que genera la ignorancia además de los disparates que hemos señalado, nos hace pensar que en las conclusiones del comunicado antes dicho y de los cambios institucionales que deben realizarse en la Estructura Civil del Estado deben de estar acompañados de la designación del Ministro de las Fuerzas Armadas y los Jefes de las Instituciones Militares, Ejército, Armada, Fuerza Aérea y el Director de la Policía Nacional. Qué ganas de juzgar por la ignorancia absoluta, de lo que es realmente el oficio de los políticos. Y que falta de respeto al derecho que por el esfuerzo de sus luchas y el sacrificio de sus mejores hijos, mujeres y hombres, se ha ganado nuestro pueblo «Legendario, Veterano de la Historia y David del Caribe» luchando virilmente por su soberanía y su independencia para ser dueño absoluto de su propio destino.
Esos disparates explican a la familia dominicana, que comprendemos, los que somos políticos profesionales, que nos sentimos orgullosos de que apoyen al PLD, el partido que concibió, fundó y organizó Juan Bosch, Presidente Moral Eterno de la República, que ha recibido, complacido y satisfecho, el apoyo del 62 % de los votantes de las elecciones del 15 de mayo de este año. A nuestras compañeras y compañeros y al Presidente de la República electo por la mayoría absoluta de los dominicanos, advertimos que tengan presente siempre que «La Pelea es Peleando».
jpm