Crea malestar Seguro Repatriación RD en Madrid
Madrid, España.- Los familiares del fallecidoRicardo Ramírezacusan al
Consulado Dominicano de Madrid de incumplir con las facilidades que otorga el
Seguro de Repatriación, el cual estuvieron pagando por 9 años con una póliza
familiar.
El Consulado Dominicano informó a “Amo Dominicana” que el fallecido Ricardo
Ramírez a pesar de encontrarse al día en el pago de sus cuotas desde el año
2005 no estaba avalado por la compañía Aseguradora DKW, la cual es representada
por la entidad dominicana, ya que aseguran su inscripción fue “irregular” al
sobrepasar el límite de edad, lo que fue desmentido por el entonces cónsul Marcos Cross.
El hoy diputado Cross aseguró a este medio que todas las inscripciones de
dominicanos a este servicio durante su
gestión se tramitaron de forma “correcta”.
Las autoridades dominicanas
representadas por el actual cónsul Juan Cuevas, afirman que en la
actualidad se desconoce la cantidad de dominicanos que pudieran verse en la
misma situación, pagando el Seguro de Repatriación sin estar debidamente
asegurados, lo que les traería
dificultades a la hora de requerir sus servicios.
Decenas de dominicanos recibirán en
los próximos días una comunicación oficial por parte del Consulado en las que se les notifica que a pesar de
estar al tanto de sus cuotas, serán excluidos del “Plan de Ayuda Mutua”, sin
importar los años que hayan tenido pagando el servicio que se ofrece a los
dominicanos en el exterior.
A continuación la denuncia integra enviada a “Amo Dominicana” por Génesis
Feliz, joven dominicana estudiante de derecho en España, en representación de
la familia Ramírez, donde acusa al Consulado de Madrid de incumplimiento y de
maltrat
QUIEN SUSCRIBE GENESIS LISBETH FELIZ RAMIREZ.
Dominicana residente en España
Este escrito que realizo es para informar a los medios de comunicación y a
nuestras autoridades públicas de nuestro país de los abusos que sufren sus
ciudadanos que estamos fuera, por medio de ciertas personas de rango, que
supuestamente nos representan fuera, en el caso de mi familia el consulado
dominicano en Madrid y sus representantes.
En el 2004 se abrió un plan de seguro de repatriación en el consulado
dominicano (plan de ayuda mutua), por el cónsul de esa época el señor Marcos
Cross Sánchez, el cual empezó funcionando bastante bien y por ello decidimos en
mi familia inscribirnos el 22 de febrero de 2005, éramos cinco personas y por
ello pagábamos una cuota de 180 euros por año a pesar de la crisis económica
que asola España hasta la actualidad, año por año, hemos pagado nuestra cuota
de seguro sin fallar.
El 12 de julio, de este mismo año lamentablemente perdimos un ser de máxima
importancia en mi familia como mi abuelo el señor RICARDO RAMÍREZ. Cuando
fuimos avisar al consulado del fallecimiento de mi abuelo para que nos
resuelvan el tema de la repatriación, la preparación del cadáver y los gastos
funerarios, entre otras prestaciones que dice la publicidad del seguro, nos
informaron que a mi abuelo lo habían sacado del seguro por ser muy viejo.
Uno de los asistentes del señor cónsul, el señor PEDRO CASTILLO, nos tiro
los papeles prácticamente en la cara y nos hacía miradas desafiantes… a pesar
del dolor, la conmoción y el no entender nada de lo que estaba pasando, llamo
al actual cónsul el señor JUAN CUEVAS que accedió a hablar con mi madre y
conmigo y el cual nos mostró una carta que nos enviarían en esa misma semana
diciendo que nos devolverían la cuota del seguro que habían cobrado en el mes
de mayo, porque el seguro del consulado había rechazado a mi abuelo por ser muy
viejo, de esta forma vulnerando y quitándonos nuestros derechos, cuando mi
abuelo estaba inscrito desde el 2005 en el dichoso seguro.
Bajo muchas luchas, lágrimas y una llamada a la cancillería en la Republica
dominicana, dijo el señor cónsul que por humanidad (como si estuviésemos
pidiendo limosnas y no tuviésemos nuestros derechos como contratantes de un
seguro), accedería a pagar los gastos funerarios y la repatriación, pero que no
pagaría el billete del familiar que debía acompañar el cadáver, ni los demás
gastos ni nada de lo que dice la propaganda del seguro. De esta forma termina
de humillarnos aún más y pisotearnos, volvimos a llamar a la cancillería y solo
así accedió al pago del billete del familiar que acompañaría el cadáver.