Acusan a 20 hombres de tráfico de drogas y armas
NUEVA YORK.- Alrededor de 20 personas fueron acusadas formalmente por su presunta participación en una red que distribuía grandes cantidades de heroína y crack en el área de la avenida Hoe y la calle Aldus, de El Bronx.
Los sospechosos, seis de los cuales fueron acusados también por posesión de armas usadas como apoyo en el tráfico de drogas, fueron detenidos en un operativo conjunto de la Fiscalía Federal para el Distrito Sur, el Buró Federal de Investigaciones (FBI) y el Departamento de Policía (NYPD).
«Los 20 individuos acusados hoy formaban parte de un peligroso equipo de traficantes de droga que sembraron el terror en El Bronx distribuyendo heroína y crack en edificios habitados por familias y niños, a una cuadra de una escuela pública», dijo en uncomunicado el fiscal federal de Manhattan, Preet Bharara.
Agregó que «esta banda protegía sus dominios con armas, sin temor de dispararlas a la gente frente al edificio de El Bronx, tal como uno de ellos es sospechoso de hacerlo en mayo».
Algunos de los acusados estuvieron involucrados en un reciente tiroteo contra dos personas frente a un edificio de apartamentos de la calle Aldus.
Quince de las personas nombradas en el pliego acusatorio ya se encuentran bajo custodia federal para ser instruidos de cargos en una corte de Manhattan.
Entre los sospechosos figuran Rafael Ojeda, de 51 años, Calvin Ojeda (24), Jonathan Ojeda (22), Servando José Gómez (41), Héctor Tirado (22), Travis Profit (28), Angel Sepúlveda (35), Eduardo Vázquez (23), Jason Pérez (24), Trevis Bowens (25), Jhovy Dionizio (27), Christian Dumes (33), Christian Ramos (26), Paquito Rodríguez (56), Gisette Rivera (56), Samuel Palmer (20), José Colón (48), Antoine Henderson (28), Adriel Ponce (25) y Christopher Richardson (22).
Desde mayo de 2014 a julio de este año, los acusados convirtieron uno de los apartamentos en centro de distribución de narcóticos que vendían en las escaleras del edificio y en otras áreas transitada por los residentes, incluyendo niños, según la Fiscalía.
Diego Rodríguez, director asistente del FBI, dijo que los acusados cometían sus actos ilegales cerca a una escuela, rodeados de familias y, sin importarles la vida de inocentes, portaban y disparaban sus armas en congestionadas calles de la ciudad.
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