Robert Oppenheimer y su equipo: los tontos útiles
Durante la reciente entrega de los Óscar, el filme Oppenheimer obtuvo el premio de mejor película del año.
En el mismo se narra la vida del científico que dirigió el proyecto de fabricación de la primera bomba atómica de la historia. Supuestamente, esta última le ahorraría» a EE.UU. muchas bajas de soldados, dado que Japón lucharía hasta el final sin rendirse y solo ella lo obligaría a capitular.
Sin embargo, la cantidad de civiles inocentes que la misma mató ( inmediatamente más de 140 mil) y millones de personas afectadas por la.radiación, no justificó su lanzamiento. Pero el presidente Truman no solo quería ganar rápidamente la guerra sino que también quería dar una demostración de poder. Es decir, tener la mortífera bomba atómica significaba ser el dueño del mundo. Empero, ello dio origen a un afán frenético por tenerla, principalmente por parte de la Unión Soviética.
Robert Oppenheimer y su equipo de científicos, en consecuencia, harían el papel de «tontos útiles»: de fabricar la temible y poderosa arma, y el gobierno estadounidense se encargaría de su uso militar y político.
Oppenheimer sufriría la desdicha del mortal invento, que -aunque le dio el mérito «de padre^ del mismo, realmente no sería de mucha satisfacción.
Hiroshima y Nagasaki, por lo tanto, sirvieron de ensayo para que EE.UU. pasara a tener la batuta del poder mundial, y a partir de ese momento no se aceptaría que más nadie tuviera la referida bomba a menos que ella fuera, según Truman, «una copia» robada de la fórmula original.
Sí señor!!!
sp-am